-¿Pero qué haces?-Pregunta Sara.
-Te beso.-
-Pues no tienes derecho a hacerlo.-
-Me gustas.-
Esa frase enamora a Sara.
-Ven, quiero enseñarte un lugar.- La coge de la mano.
Los dos caminan juntos, pasan por unos cuantos barrios pobres, y llegan a una montaña, a la que suben.
Un ligero olor a muerte llega a la nariz de Lucas.
De pronto, insconcientemente se transforma en lobo.
Sara acaricia al lobo.
-No puede ser real.- Susurra Sara.
De una de las cuevas de la montaña, sale una mandada de lobos hambrienta.
El jefe de la manada corre tras Sara.
A Sara le resulta familiar el arañazo que el jefe de la manada presenta en el ojo.
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